Pero por mas que nos vendan la moto de que no existe la sociedad de clases, "haberlas, hailas" . Según ellos todos somos iguales y que el mundo es un lugar utópico y maravilloso donde todos tenemos los mismos derechos... el que viva en la vida real, sabrá que esto no es cierto. No hay que dejarse engañar. En la sociedad hay clases:
BURGUESÍA: La burguesía posee los medios de producción, que pone a disposición del proletariado para que trabaje para él a cambio de un salario; siendo los frutos de ese trabajo propiedad del burgués.
A su vez la burguesía puede ser rentista, como los aristócratas o los ricos que no trabajan, ó capitalista, que son los empresarios.
PROLETARIADO: Dentro de este grupo se engloban todas aquellas personas que trabajan. Pueden ser asalariados, si trabajan por cuenta ajena o autónomos.
Hay que quitarse el estigma de que ser de clase obrera, ser proletario, ser obrero, etc... es algo malo. Trabajar para comer y subsistir sin pisar al que esta abajo, jamas debe ser considerado algo negativo, al revés debería ser un orgullo.
Vivimos en una sociedad que aún arrastra en sus genes la lacra de la postguerra. Todos pasamos hambre, de un bando u otro. Hoy en día, por aparentar, todos vamos buscando nuestro escudo de armas... con el fin de darle alcurnia a nuestras vidas. Una mentira, para vender, ya que el escudo de armas no pertenece a un apellido sino a una familia... y además hasta que punto ser un parásito social es algo de lo que vanagloriarse... mundo extraño este, en el que escupimos en la memoria de nuestros antepasados... si ellos vieran que hoy aplaudimos a los nietos y tataranietos de aquellos que los esclavizaron hasta sus últimos días....
Me tomo la licencia de citar a mi padre, en su libro "La bal de Chistau con nombres y apellidos"
La gran mayoría de los mortales no hemos tenido un antepasado noble. Piénsese que los aristócratas eran solo una pequeña parte de la población. Si hubieran sido muchos no habrían podido aprovecharse de la sangre y el sudor de los campesinos, animosos e ignorantes, verdaderos antepasados de la mayor parte de nosotros. Estos últimos eran los que conservaban las tradiciones, escribían las canciones, transmitían los remedios naturales, etc. Los aristócratas, sin embargo, se han extinguido por causas genéticas o pobreza intelectual; en cambio los descendientes de "los peones" y "los labradores" hoy brillan en las universidades, tienen títulos, escriben poemas y en definitiva tienen un brillante futuro por delante.
Es por ello, que nunca debemos olvidar quienes somos y donde venimos.... y menos aún avergonzarnos por ello.... pues no es vergüenza, si no orgullo, lo que debemos sentir.... lo contrario seria dejarle el camino libre a nuestros enemigos para que nos ataquen donde duele...
Cuanta gente no me he encontrado, que vota a la derecha porque piensan que así serán ricos, cuanta gente falsea su legado familiar por aparentar, cuanta gente no reniega de sus familia menos favorecida.... esa gente no es digna de ser llamada obrera, de pertenecer a la única clase social que es productiva... quien reniega o vende a los suyos.. no es digno de ser llamado persona.
¡¡¡Solo la unión de nuestras fuerzas, nos hará fuertes!!! Nosotros podemos.