El suceso

Yo, una persona normal, que trabaja en una empresa de reformas de gas, fontanería y electricidad, llamada Instalaciones Y Servicios La Cartuja S.L., cuyo administrador es Manuel Turon Quilez. Vuelvo un día apacible de agosto a mi puesto de trabajo y me encuentro con inequívocas señales de  que por ahí no pasaba nadie desde hacia mucho.

Esto sumado a que llevaba ya varios meses sin percibir mi nomina y que Manuel hacia semanas que no me cogía el teléfono, hacen que me de mal rollo el asunto.

Pero, como ante todo, soy una buena persona y me gusta dar el beneficio de la  duda, aguardo.... al final de la jornada voy a casa de mi jefe donde nadie me abre la puerta, así que le dejo una nota rogándole que me llame. Y  de vuelta, pregunto por los bares (donde es mas fácil encontrarlo) pero allí tampoco sabe nadie nada.

Pasan los días sin que nadie dé señales de vida, voy dejando notas y recados por ahí, y sigo yendo a trabajar.

Pero harta de no tener dinero para pagar mi casa (no tengo un novio/marido que comparta gastos conmigo), ni la luz, ni para nada.... ni siquiera para comer.... harta de estar aprovechándome de los amigos y de la familia.... hago lo que es justo.... denunciar.

Y lo hago por dos vías, por un lado lo pongo en conocimiento del sindicato que me buscan un abogado y por otro lo denuncio a inspección de trabajo. Pasa el tiempo, la justicia es lenta y sigo sin tener respuesta, esta agobiante situación de no tener  NADA (recordar que como "tengo trabajo" no tengo derecho al paro, ni a ayudas ni a subvenciones.... aunque este recibiendo mi dinero, mi nomina) me provocan una depresión... tras dos semanitas de baja, tengo que reincorporarme..... imagina que no tienes para comer pero tienes que conseguir dinero para gasolina para poder ir a trabajar .....

Asqueada me fui en busca del "jefe desaparecido" y lo encontré, como no, en un bar , de nombre "es lo k hay" (irónico ¿eh?) que había adquirido junto a otros socios meses atrás. Tras aguantar que una persona que no se había dignado en llamarme pese a , como reconoció, haber recibido mis mensajes, me echara la culpa porque no hacia falta que lo denunciara (si llevas meses sin cobrar y nadie se digna en contestar tus llamadas ni llamarte... a mi no se me ocurría otra idea.... bueno si, pero digo "legal") comprendí que su juego era mas complejo.... seguramente alguno de los trapicheos a los que acostumbra, le impide declarar en quiebra la empresa.... la perjudicada, una misma.

El asunto es que la baja se me acababa y tenia que volver, así lo hice.... y descubrí que me habían cambiado la cerradura.... otra denuncia mas y a casa.

Tras dos visitas al SAMA, donde mi jefe no tiene la decencia de aparecer, y otra de inspección laboral, donde tampoco se persona, el juicio sigue para adelante y la fijan  UN 1 DE MARZO DEL 2011.

Imaginaos la situación, no cobras desde antes del verano, no tienes con que pagar tu hipoteca, con que comer, estas condenada a ir a trabajar...pero sin cobrar, a la espera de un juicio que se celebrara cuando te deban 10 meses de salario.... y que Fogasa (tus impuestos) me pagara dos años después, pero solo 5 meses de salario.

Claro que, por lo menos podre apuntarme al paro...claro que en mayo, porque la sentencia tarda y hasta entonces no estaré despedida.


Nadie esta libre de vivir esta situación, no te engañes. Si me vieras por la calle seria una ciudadana mas, no repararías en mi, solo soy un ejemplo más de miles de dramas que sufren esa clase, llamada, media, hoy desaparecida. Uno de tantos casos que, por causas ajenas a su voluntad (yo no pedí que no me pagaran, que mi jefe huyera como una rata o que la justicia fuera lenta), perderán lo poco que tienen... una de tanta gente normal, que no tiene para comer... es duro decirlo, pero mas aún vivirlo.... sin sueldo, sin dignidad y sin derechos. Solo nos queda hacernos oir, para que al menos, nuestro dolo, sirva de aviso a los siguientes.