martes, 3 de enero de 2012

El cuento de la lechera y los corredores mediterráneo y atlántico

Me gustaría hacerme eco del siguiente articulo visto aquí.




Ante el entusiasmo generado por el anuncio del Comisario Europeo de Transportes con respecto a los ejes ferroviarios prioritarios, Ecologistas en Acción quiere hacer algunas apreciaciones. La principal: ¿de dónde va a salir el dinero para financiar esos 7.000 millones de euros anuales necesarios? ¿Va a suponer que se abandonen los proyectos AVE, lo que sí sería una magnífica noticia? ¿O vamos a seguir apostando por profundizar en lo que ya somos: el país con más y mejores infraestructuras de Europa –y más infrautilizadas– y uno de los que más recortes sociales está aplicando?

Ecologistas en Acción siempre ha apoyado el transporte de mercancías por ferrocarril, pero ve con gran desconfianza toda la orgía de obra pública que se está preparando al hilo de los corredores prioritarios designados ayer, de forma provisional, por la Comisión Europea.

Argumentos de Ecologistas en Acción:
España ha venido durante décadas dando la espalda al ferrocarril, y en especial al transporte de mercancías por este medio, lo que nos sitúa en un decreciente 4% de mercancías transportadas en tren con respecto al resto de modos. Sin embargo, como ya ocurriera hace unos años con el AVE, del abandono se quiere pasar a unas inversiones faraónicas que está por ver que podamos costear… y que sean las que necesitamos.
Así, el Ministerio de Fomento ha venido gastando unos 19.000 millones de euros en infraestructuras de transporte cada año en 2008 y 2009, cifra que se redujo algo en 2010, y que en 2011 ha quedado en 13.000 millones. Para valorar la magnitud de estas cifras, recuérdese que el decretazo de mayo de 2010 suponía unos ahorros de 7.500 millones al año. Además, está el gasto de las Comunidades Autónomas en otras infraestructuras de transporte, que en su conjunto puede superar (al menos hasta 2009) los 5.000 millones al año.

De esas enormes cantidades el AVE ha sido el medio más favorecido: ha recibido, grosso modo, 7.000 millones de euros al año para nueva infraestructura. ¿De dónde, por tanto, van a salir los, también, 7.000 millones de euros anuales necesarios para hacer casi de nuevas los corredores ferroviarios para mercancías que se están planteando para antes de 2020? ¿Serán a costa de suspender las inversiones en AVE, lo que sería una fantástica noticia, o se sumarán a ese gasto?

Además, ¿no se había prometido que la construcción del AVE iba a permitir que “liberáramos” la red convencional para el tránsito de mercancías? ¿Cómo se justifica, entonces, todas estas inversiones en trazados nuevos para mercancías?

¿Van a servir estos corredores de pretexto para ampliar los puertos mediterráneos y atlánticos, y construir otros nuevos como el de Gorgel, en Murcia, con la expectativa de los aumentos de tráfico que se van a generar? ¿Se puede creer de verdad que los grandes operadores logísticos van a recalar en la fachada marítima mediterránea para luego continuar en tren hasta el norte de Europa, cuando tienen resuelta la logística en lugares como Rotterdam de forma más rápida y sencilla?

Pero, ¿es que no se sabe que vivimos en un planeta con recursos limitados? ¿Pensamos que se va a poder seguir incrementando el tránsito de mercancías indefinidamente con la crisis climática que estamos provocando? ¿Que siempre vamos a tener petróleo para mover cantidades crecientes de productos de Asia a Europa?

Y, la última pregunta que se plantea Ecologistas en Acción a este respecto: ¿aún hay alguien que se crea el “cuento de la lechera” de las infraestructuras de transporte, aquello de que generan riqueza y empleo por doquier, viviendo en el país que tiene las infraestructuras más modernas y en mayor cantidad de Europa (más kilómetros de autopistas-autovías, más kilómetros de AVE y más cantidad de aeropuertos), y donde tenemos la mayor tasa de desempleo y se nos están aplicando algunos de los más draconianos recortes sociales?